Compartimos una receta de leche condensada casera que nos encanta por todos los recuerdos que nos vienen a la mente, ya que es la que utilizaban nuestras abuelas para elaborar esta tradicional crema acompañar pan, galletas bizcochos o para añadir al café de la tarde.
Ingredientes:
2 tazas de leche en polvo
2/3 de taza de azúcar
1 taza de agua caliente
1 cucharada de mantequilla (opcional)
1/2 cucharadita de extracto de vainilla (opcional)
Preparación:
En un tazón, mezcla la leche en polvo con el azúcar.
Agrega el agua caliente poco a poco, mezclando constantemente para evitar grumos.
Si estás usando mantequilla y extracto de vainilla, agrégales a la mezcla y continúa mezclando hasta que todos los ingredientes estén bien incorporados.
Transfiere la mezcla a una licuadora o procesador de alimentos y mezcla a alta velocidad durante unos 2-3 minutos hasta obtener una mezcla suave y homogénea.
Vierte la leche condensada casera en un frasco o recipiente hermético y refrigérala. Se espesará aún más a medida que se enfríe.
¡Y eso es todo! Ahora tienes leche condensada casera lista para usar en tus recetas favoritas. Ten en cuenta que la leche condensada casera puede tener una consistencia ligeramente diferente a la comercial, pero es igualmente deliciosa. ¡Disfruta!